En América Latina, la transformación digital en servicios financieros es vista como una necesidad estratégica para competir, cumplir con regulaciones y responder a las expectativas de clientes cada vez más digitales. Sin embargo, el verdadero reto no termina con el lanzamiento de nuevas plataformas o aplicaciones: el valor de la transformación se pone a prueba en la fase posterior a la implementación. Es aquí donde muchas instituciones financieras de la región enfrentan el mayor riesgo de erosión de valor, pero también donde se encuentran las mayores oportunidades para lograr un impacto duradero.
A pesar de inversiones significativas, hasta el 95% de las iniciativas de transformación digital no alcanzan sus objetivos, y la mayor caída de valor ocurre después del lanzamiento inicial, durante la fase de mantenimiento y operación. En América Latina, este desafío se ve amplificado por factores como:
Errores comunes incluyen la pérdida de conocimiento crítico al transferir proyectos a equipos internos o externos, operaciones fragmentadas y la falta de medición continua, lo que dificulta identificar problemas o áreas de mejora antes de que impacten el negocio o la experiencia del cliente.
Para evitar la erosión de valor, las organizaciones financieras latinoamericanas deben ir más allá de la visión de proyectos puntuales y adoptar una mentalidad de producto, donde la entrega de valor es un proceso continuo. Esto implica:
Un enfoque efectivo es mantener involucrados a los equipos que desarrollaron las soluciones digitales en su soporte y optimización continua. Esto permite:
En América Latina, donde la rotación de personal y la tercerización son comunes, es esencial evitar la pérdida de conocimiento crítico. Involucrar a ingenieros de soporte y expertos desde la etapa de transformación ayuda a mantener el rendimiento óptimo y a evitar costosos vacíos de información. Además, fomenta una cultura de colaboración y responsabilidad compartida entre equipos de producto y soporte.
El seguimiento en tiempo real de KPIs permite:
Herramientas de medición visuales y flexibles facilitan la visibilidad para todos los niveles de la organización, desde ingenieros hasta ejecutivos, y permiten escalar buenas prácticas en múltiples equipos y unidades de negocio.
Las instituciones financieras que invierten en sostener su transformación digital logran:
En un entorno donde el cambio es constante y las expectativas de los clientes evolucionan rápidamente, las organizaciones que prosperan son aquellas que tratan la transformación digital como una capacidad viva y en evolución. Adoptar una mentalidad de mejora continua, invertir en servicios post-implementación y medir el valor en tiempo real son claves para asegurar que la transformación digital en servicios financieros en América Latina no solo sobreviva al lanzamiento, sino que genere valor todos los días.
¿Listo para sostener y hacer crecer el valor de tu transformación digital? El momento de actuar es ahora.