En América Latina, los bancos, aseguradoras y gestores de activos enfrentan una encrucijada crítica. Décadas de inversiones tecnológicas incrementales han dejado a muchas instituciones con una maraña de sistemas heredados, datos aislados y una creciente deuda tecnológica. Este lastre no solo limita la innovación y la eficiencia operativa, sino que también dificulta la entrega de experiencias seguras y personalizadas a escala, en un entorno donde la regulación y la competencia digital son cada vez más exigentes.
En países como México, la presión para modernizar es aún mayor debido a la rápida digitalización de los servicios financieros, la entrada de fintechs y la necesidad de cumplir con normativas locales e internacionales. Sin embargo, a pesar de que cerca del 30% del presupuesto de TI se destina a modernización, solo una minoría de organizaciones ha logrado transformar sus aplicaciones centrales con éxito.
A través de la experiencia regional, se identifican cinco formas críticas de "deuda" que las instituciones financieras deben abordar para liberar el potencial de la inteligencia artificial (IA):
Abordar estas deudas de manera integral es esencial para crear valor sostenible y acelerar la adopción de IA en el sector financiero latinoamericano.
La IA no es solo una herramienta más en el proceso de modernización; es el motor capaz de desmantelar incluso las formas más persistentes de deuda tecnológica. Más del 80% de los ejecutivos del sector financiero consideran que la IA es el factor decisivo para superar la deuda tecnológica. Sin embargo, la tecnología por sí sola no basta: el éxito requiere un cambio de mentalidad, modelos de entrega innovadores y una arquitectura operativa flexible.
En México y otros mercados latinoamericanos, está surgiendo el paradigma de "servicios como software", donde la tecnología —y no solo las personas— entrega servicios. Este modelo permite:
La modernización impulsada por IA ya está generando resultados medibles en la región:
A pesar del potencial, muchas instituciones mexicanas y latinoamericanas siguen en fase experimental. Las principales barreras incluyen:
Para avanzar, los líderes deben:
El modelo SPEED —Estrategia, Producto, Experiencia, Ingeniería y Datos & IA— conecta la visión de negocio con la ejecución tecnológica y la experiencia del cliente. Asociaciones estratégicas con líderes tecnológicos globales y plataformas propietarias como Sapient Slingshot permiten automatizar el ciclo de vida del software, modernizar sistemas heredados y escalar la adopción de IA con confianza.
El futuro pertenece a las instituciones que logren romper con la deuda tecnológica y aprovechar la IA como motor de innovación, eficiencia y valor para el cliente. Al abordar de manera integral la deuda tecnológica, de datos, procesos, habilidades y cultura, los bancos y aseguradoras de México y América Latina pueden pasar de cambios incrementales a una transformación a escala empresarial.
¿Listo para romper la deuda tecnológica y liderar la próxima ola de innovación financiera en América Latina? Hablemos sobre tu viaje de modernización.